Higiene

Los cobayas son animales muy limpios, por lo que evitaremos el baño a menos que sea estrictamente necesario. Para su limpieza podemos utilizar toallitas de bebés. Si fuera necesario bañarlos debemos tener en cuenta que no debemos mojarle la cabecita ni las orejas. Utilizaremos un champú específico para roedores y el agua debe estar templada.

Una vez hayamos finalizado, nos aseguraremos de que quede totalmente seco (de lo contrario podría resfriarse), para lo cual utilizaremos el secador si fuera necesario (con cuidado de no quemarle).

Para el cepillado diario de la cobaya se puede usar un cepillo de metal suave, esto hará que elimine el pelo suelto y enredos, disminuyendo la caída de pelo.

Limpieza de genitales masculinos

Los machos, sobre todo cuando andan por la jaula ,marcan territorio o cuando están en celo, sacan los testículos y los vuelven a meter o los arrastran por el suelo. Así que se les va metiendo heno y pelos ,por lo que se va acumulando, provocando mal olor.

En definitiva, se debe hacer por su buena salud e higiene, y para evitar infecciones en los genitales. Ellos no sufren ni les duele el hacérselo y las ventajas son muchas.

Se tumba a los machos boca arriba sujetado por alguien, con el culito mirando hacia ti (es mejor que te ayude alguien). Debes abrir la parte del culete separando la zona con los dedos, “abriéndola”, ya que no se ve a simple vista. Veras que ahí hay suciedad, que se debe sacar con un bastoncillo de oídos impregnado en aceite de oliva.

También se debe limpiar los testículos y el exterior con toallitas de bebe.
Se debe hacer con mucho cuidado y sin ser bruscos para no hacerle daño.

¡Importante! Los machos tienen una glándula dentro, es como una bolita, puede que la veas cuando este limpio del todo, pero no la debes tocar ni intentar quitar.

Es recomendable realizar una limpieza de los genitales del macho una vez al mes, sobre a los adultos.

Es necesario si quieres que tu cobaya este sana . Cuando son muy jóvenes no se aprecia pero según van creciendo se le va acumulando la suciedad, incluso pueden entrar hebras de heno en la zona del pene. Ya de por sí los machos adultos pueden tener problemas al defecar o al orinar.